Ha llegado esa época del año en que hay que presentar la declaración de la Renta. Hacerlo bien puede suponer una enorme diferencia en la cantidad que te salga a pagar o recuperar, así como prevenir problemas en el futuro. Por eso hemos querido dedicar un momento a recordar cómo prevenir los errores más habituales.
Recuerda que la declaración anual de la Renta, que es como llamamos normalmente al modelo 100, es una especie de resumen de todas las operaciones que has hecho durante el año de forma personal. De una forma muy simplificada, si el resultado de todas esas operaciones es positivo (tienes más patrimonio) te toca pagar. Si es negativo (has perdido patrimonio) no tienes que pagar y puedes recuperar una parte de lo que te hayan retenido durante el año. Por eso se denomina «Impuesto sobre la Renta», porque graba las rentas; esto es, los beneficios que reciben las personas por su actividad profesional, el rendimiento de sus inversiones o cualquier otro concepto.
Siguiendo el principio de «aplicación progresiva de los impuestos», la idea es que aquellos contribuyentes que tienen unos ingresos más altos (en este caso, que han incrementado más su patrimonio) contribuyen con una cantidad mayor a los gastos del Estado. Hacer bien la declaración de Renta implica pagar lo justo. No hay que pagar de más, pero tampoco de menos. ¿Cómo puedes evitar errores?
- Preséntala a tiempo. Esto puede parecer una trivialidad, pero hay mucha gente a la que se le pasa la fecha y no la ha presentado. La campaña de la Renta dura bastantes tiempo, más de dos meses, así que tienes tiempo de sobra para hacerlo. Lo mejor es que lo hagas lo antes posible. Te quitas el problema y además consigues que la devolución, si es que te sale negativa, te llegue lo antes posible.
- Anota bien la cuenta de devoluciones. Puede haber muchos motivos por los que cometas un error al indicar la cuenta de pago. Por ejemplo, Caixabank absorbió los restos de Bankia el año pasado y la numeración de algunas cuentas ha cambiado. También es posible que hayan cerrado la sucursal en la que abriste la cuenta originalmente lo que, de nuevo, puede haber provocado que cambie el número de cuenta. Por último, si tienes varias cuentas personales, es posible que anotes una que usas poco y que pueden cerrarte, lo que ocurre a menudo con los neobancos sin sedes físicas (Revolut, N26 y similares).
- Confirma las desgravaciones por hijos. Las personas divorciadas tienen que confirmar entre ellas quién se desgrava los gastos por descencientes, así como la pensión de alimentos. Puede suponer una diferencia importante. Si tienes que pagar pensión, haz el pago por transferencia todos los meses y saca ahora un listado de los que hiciste el año pasado; así podrás ver con claridad la cantidad exacta y tendrás una prueba del banco en caso de que tengas que acreditarlo.
- Confirma el borrador, aunque parezca que no llegues al límite. Hay muchas personas que aplican una especie de truco: «como no llego al límite, no tengo que presentarla». El error consiste en calcular ese límite incluyendo sólo los rendimientos del trabajo (la nómina). Pero ¿y el resto de conceptos? El saldo en las cuentas bancarias genera intereses, si alquilas un piso eso genera un alquiler mensual… y todos esos conceptos incrementan la cifra de tus ganancias en el ejercicio anual, de forma que puedes superar ampliamente el límite. Así que, asegúrate y confirma el borrador, incluyendo todos los conceptos.
- Declara todas las ganancias patrimoniales. TODAS. En el apartado anterior hemos considerado aquellas fuentes de ingresos regulares, pero también hay ingresos extraordinarios que debes tener en cuenta. Por ejemplo, los premios de loterías, las becas o el beneficio que obtengas por la venta de una casa constituyen un incremento de patrimonio y debes declararlos.
Es importante revisar bien el borrador e incluir todos los conceptos (tanto de ingresos como de gastos). Una revisión puede tener consecuencias imprevisibles. Nuestro consejo es que lo planifiques y prepares con bastante antelación. No esperes a que los anuncios institucionales en televisión o prensa te avisen de que empieza el plazo de presentación. Adelántate y prepáralo todo entre Noviembre y Diciembre, antes del cierre del ejercicio. De esa forma podrás optimizar el resultado. Y si tienes dudas, siempre puedes consultarnos 🙂